Mi visión de la medicina en general y de la ginecología en particular está centrada en brindar un trato de calidad a las pacientes. Considero que la relación médico-paciente es prioritaria. Por eso me brindo plenamente en cada consulta.
Desde los inicios de mi formación como especialista he tenido en claro estas premisas. A lo largo del tiempo he desarrollado una carrera profesional con una fuerte inclinación hacia la actividad quirúrgica y eso me ha permitido tratar con pacientes con patologías complejas y de difícil manejo. Es en ese contexto en el que vi confirmadas mis convicciones. Desde la paciente completamente sana que consulta por un control rutinario hasta quien padece una patología compleja merecen el mismo trato y dedicación.
Esa es mi principal fortaleza. Brindar confianza y claridad en la atención cotidiana a mis pacientes.
En los últimos años he incursionado en el campo de los tratamientos con láser en ginecología y he encontrado un campo en plena expansión. Gracias a los avances tecnológicos hoy estamos en condiciones de ofrecer alternativas superadoras en el tratamiento de la incontinencia urinaria y de disfunciones en el puerperio y en el climaterio. Es un error conceptual asociar el láser con tratamientos estéticos; debe considerarse una herramienta más para mejorar la calidad de vida de nuestras pacientes.